En Mateo 28, Jesús dice a Sus discípulos «id y haced discípulos de todas las naciones… enseñándoles a obedecer todo lo que os he mandado.» (Mateo 28: 19-20 NVI). 

Como creyentes en Cristo, hemos recibido la comisión de ser Sus testigos en cada país, pueblo y cultura. Somos llamados de compartir Su mensaje de esperanza, de proclamar al mundo de lo que Él ha hecho en nosotros – y lo que Él puede hacer por otros.

Cuando nuestros esfuerzos se enfocan en conocer y dar a conocer a Dios, vamos a experimentar Su gloria y grandeza. Y vamos a ver comunidades transformadas en maneras que la ambición humana nunca podría alcanzar. El Espíritu de Dios une, motiva y hace crecer comunidades de Cristianos mientras ellos ven a Dios cambiando vidas a través de su misericordia, nuevos inicios y esperanza para individuos, no importando quienes son o de donde vienen.

El mensaje y la experiencia de OM siempre ha sido que Dios usa personas ordinarias (como tu) para alcanzar a otras personas ordinarias. Aunque hay una sola verdad en evangelismo, cada persona necesita el perdón de Dios a través de Jesu Cristo para ser completamente restaurado, no hay un límite de lugares donde se puede transmitir este mensaje:

en las calles de Tailandia,

tomando té en Turquía,

jugando futbol en Argentina,

enseñando inglés en Ucrania,

cuidando los enfermos en África…

y muchos más!

Si tú lo puedes imaginar, probablemente OM lo está haciendo en algún lugar. Porque no unirte a nosotros?

Literalmente millones de personas, hasta al fin del mundo, están esperando  escuchar de alguien que testifique acerca de Cristo. Sé tu esta persona con nosotros. Tráete tu pasión. Tus habilidades. Sé un testigo a las naciones.